Estoy viendo los juegos de invierno, una pareja de patinadores flota y se desliza encima del hielo mientras escucho música clásica, me siento como si fuera yo la que estuviera patinando. Esto es uno de los momentos donde me siento libre. A veces pienso en cosas fantásticas, cosas que en la realidad no puedo hacer y me siento etérea, volátil y ...... Entonces, pienso en las cosas que de verdad importan. Son las cosas más cotidianas, las más sencillas, las que apenas percibimos. Una de las más importantes es pasar un minuto, o una hora, o cinco horas con las personas que te importan, con las que te sientes cómoda, con las que eres tú misma y con las que con sólo mirarte, saben que ocurre . Yo me siento afortunada por tener todo eso, por sentirme querida , y a la vez, recibir opiniones opuestas a las mías, que me hacen madurar y mejorar como persona.
Gracias porque tengo amigos que me escuchan, me aconsejan, me critican y sobre todo,
me necesitan para que sus vidas tengan sentido.
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